4 actividades para no perderse en Cuba

Share on facebook
Share on whatsapp
Share on twitter
Share on linkedin

¿Vas a visitar Cuba pronto y queres saber cuáles son los mejores lugares para conocer?

No importa cuánto te prepares para un viaje a Cuba, te vas a impresionar: la vida, el color, la música … todo está ahí, la personalidad de este país fascinante es magnética, infecciosa e imposible de decir que no.

Lo más interesante es que esta increíble vitalidad está en todas las partes de Cuba.

Tour por La Habana en un auto clásico

Un viaje a través de Habana Vieja y a lo largo del agua en un Cadillac convertible de color rosa brillante, u otro de los autos clásicos característicos de Cuba. Es algo muy turístico que vale la pena el cliché. Las fotos que saques de viajar en un automóvil brillante a través de la arquitectura clásica son exclusivamente cubanas. ¿Y cuándo más vas a viajar en un Chevy ’57 descapotable en un día soleado?

Valle de Viñales

La plantación de tabaco del Valle de Vinales es una plantación en funcionamiento donde cultivan las dos exportaciones agrícolas más famosas de Cuba: café y tabaco. Es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es una parada popular en muchas giras, pero a pesar de que a menudo está lleno de gente, sigue siendo un lugar divertido para tomar fotos y pasar la tarde.

El Museo de Hemingway

Finca la Vigia es la antigua casa de Ernest Hemingway a unos pocos kilómetros de La Habana. Es una extensa finca en una colina con una piscina, artefactos de Hemingway y el Pilar, el famoso barco del autor. La impresionante casa también es donde escribió “El viejo y el mar” y “Por quién doblan las campanas. Está entre las grandes casas mejor conservadas del país, y por lo general hay una banda cubana tocando cerca de la entrada con un bar de ron. También corren anécdotas únicas sobre el tiempo de Hemingway, como cuando solía espiar a Ava Gardner en la pileta.

Playa Las Tumbas

Una playa remota en el punto más occidental de la isla donde rara vez vas a encontrar algo más que palmeras, arena blanca y agua cristalina. Se encuentra al final del Parque Nacional Península de Guanahacabibes, a cuatro o cinco horas de La Habana. Es lejos, pero vale la pena.

Lo único de esta playa es la sensación de tener un pedazo de paraíso solo para vos. Es una excelente manera de ver partes de la isla que la mayoría de la gente no ve.

Dejá tu comentario

Regístrate para recibir lo último

Sólo te vamos a enviar contenido relevante, nada de spam.